Hasta la vista 2020+

PRIMER ACTO

(El editor de Bahía Sin Fondo sube al atril, despeinado y con la camisa arrugada. Su rostro es sombrío, ojeroso. Saca un papel abollado del bolsillo del pantalón, carraspea y empieza a leer con voz grave)

Buenas noches. Perdonen mi apariencia, pero la verdad es que no he tenido tiempo ni ganas de emprolijarme. Entiendo que al leer el título de esta nota habrán notado que tiene un error. Pero no, la verdad es que no es así, el título está bien escrito. A mi entender el 2021 no existió, en realidad fue el 2020 que se camufló y ocupó el lugar del 2021, por eso creo que es más correcto hablar de 2020+, "dos mil veinte plus", una malísima segunda parte de una de por sí mala primera parte. ¿Por qué opino así de este año que finaliza? Porque básicamente...

¡NO!- suena un reclamo que proviene de atrás del escenario, de la parte que está a oscuras

El editor carraspea, mira a un lado y a otro, y continua: - Bueno, les decía que opino así de este año porque...-

¡NO, NO, y NO! - retumba el reclamo otra vez

Pero... ¿quién me interrumpe? - dice el editor sin mucha convicción - un poco más de respeto por favor, este es mi blog y yo digo lo que quiero porque creo que...-

¡BASTA! ¡Me cansé de tu pesimismo! - reclamó la voz, y una figura salió de las sombras. Era un perfecto clon del mismo editor del blog, pero prolijamente vestido y peinado, que caminaba con pasos firmes y seguros.

¿Quién sos vos? - preguntó la versión sombría del editor

Soy el vaso medio lleno que has decidido no ver - respondió la versión prolija del editor

¡Ja! ¡Vaso medio lleno! ¡Dejame de $%#"$@!

La versión prolija del editor meneó la cabeza, se acercó a su imagen especular, lo rodeó con el brazo y le pidió con calma que se relaje. - Dejame que siga yo, estás cansado, tomate un respiro y dejame seguir con esto.

El editor sombrío protestó, pero sin muchas ganas. Era cierto, estaba cansado. Mejor dejarlo a su gemelo positivo, al vaso medio lleno que había aparecido detrás de las sombras.

BAJA EL TELÓN

Una tarde ventosa al norte de Puerto Madryn (Fotografía tomada en julio de 2020+)

SEGUNDO ACTO

(Toma la palabra la versión optimista del editor del blog)

En primer lugar quiero pedir disculpas por la extraña presentación de la nota de hoy, quizás la última del año, pero la pequeña opereta que acabo de resumir en el primer acto es casi real. Empecé a escribir esta nota de hoy con un tono claramente pesimista y negativo, hasta que releí lo (poco) que había escrito y me pregunté si en realidad era tan así. La verdad es que no, 2021, o 2020+, fue un año lleno de claroscuros, con muchas cosas malas, al igual que 2020, pero también con otras buenas, las cuales merecen su lugar. No voy a hacer un resumen ni de mi vida personal, que tuvo varios altibajos, con momentos difíciles y otros muy positivos, ni mi vida laboral, que pasó más o menos por los mismos trances. Quiero dedicarme al blog, y a todo lo que gira en torno al mismo, así que vamos a repasar algunos hitos a continuación.

1) Publicaciones: Este año termina con la menor cantidad de publicaciones en el blog desde su comienzo en 2010. Con 17 publicaciones, contando ésta que están leyendo, se ubica por debajo de la menor marca hasta el momento, que fueron las 20 notas de 2020. Muy lejos estoy de las 66 notas de 2011 o las 52 de 2012, aunque también es cierto que, en promedio, las notas de los últimos años tienen mayor calidad que las de una década atrás. Esta baja refleja una realidad con la que tengo que lidiar: falta de tiempo, principalmente, y dificultad para redondear notas breves, las cuales se terminan convirtiendo en extensas la mayoría de las veces. Mucho me temo que en los próximos años voy a andar por este mismo derrotero, digamos, no más de una o dos notas por mes.

2) Temas tratados: De las 16 publicaciones, exceptuando ésta que están leyendo, 13 estuvieron dedicadas en mayor o menor medida a la Patagonia, y solo 3 fueron completamente ajenas a este tema. La nota más leída fue la que escribí el 4 de enero, una nota escrita en caliente, con la emoción del momento, dedicada a Don Oscar Ebene, un madrynense de lujo que se llevó el 2020 en su último día. La siguiente nota en relevancia fue la que escribí el 30 de agosto, sobre un naufragio muy poco conocido que se encuentra en la Península Valdés: el vapor Maude. Hubo dos notas completamente personales y autoreferenciales, dedicadas a los dos libros que vieron la luz este año y en los que me encuentro involucrado: Pecios en el Golfo Nuevo, en coautoría con Victor Tidona, y la historia del vapor Kaiser, editado hace pocas semanas a través de la editorial Remitente Patagonia. Como curiosidad, este año publiqué la primera nota invitada en el blog, una nota escrita por Guido Seidel acerca de las anclas halladas en el balneario San Cayetano en el verano pasado.

3) Un año, dos libros: El año comenzó con una sorpresa muy especial, ya que habíamos editado con mi amigo Victor Tidona el fotolibro Pecios en el Golfo Nuevo, dedicado a los pecios que se hallan en la costa de Puerto Madryn y sus inmediaciones (Colomba, Kaiser, Folias, Punta Cuevas y Punta Ameghino). El libro en cuestión, editado en forma digital, es una forma de rescate histórico con una visión artística, combinado con documentación histórica. Ese libro, que nació de una idea-proyecto de Victor, me incentivó a retomar otro proyecto personal, que dormía en mi computadora, un borrador de un libro sobre el vapor Kaiser. Durante este año me dediqué, como siempre, robándole minutos al día, a completar el libro, empezando por reunir toda la información recopilada en las diferentes notas del blog dedicadas al Kaiser. A eso le agregué material adicional que no había publicado en el blog, cosas que había recopilado en los últimos años y algunas fotos poco conocidas. El resultado vio la luz hace un par de semanas y ya está en librerías, no solo de Puerto Madryn, sino también de la zona del Valle Inferior del Río Chubut, la Comarca Andina y Comodoro Rivadavia.

BAJA EL TELÓN

 

Paisaje a la vera de la RN251, entre Río Colorado y General Conesa (Fotografía tomada en julio de 2020+)

TERCER ACTO

(La versión pesimista del editor del blog se acerca y le susurra algo al oído a su contraparte optimista. Cuchichean algo a media voz y luego se separan, con un leve asentimiento mutuo con la cabeza) 

Otros años he aprovechado esta recta final para comentar cosas que compartí por las redes o plantear temas sueltos que se me ocurrían en el momento. Sin embargo, lo que quiero comentar ahora es lo que pienso del año próximo, ya que éste inexorablemente se termina en pocos días. Analizando la tendencia de los últimos dos/tres años veo que el ritmo de publicaciones no termina de levantar cabeza y también que cada vez acumulo más artículos inconclusos en mi computadora. Tengo ganas de atacar y poner en cero esa lista de pendientes que por el momento ronda unos cincuenta artículos diferentes (la producción de dos o tres años al ritmo actual). Pero la realidad es que siempre falta tiempo para completar esos hitos pendientes, y con el tiempo me he vuelto más exigente, y prefiero no publicar notas cuando sé que me quedan cabos sueltos que puedo resolver, pero que me falta alguna fuente de información adicional. Sin embargo, a pesar de las dificultades, no quiero dejar el blog, ya que ha sido, y es, un canal de difusión que me gusta mucho y que ha servido de disparador para otras cosas, como por ejemplo, el libro del Kaiser. Por eso mi humilde expectativa para Bahía Sin Fondo en 2022 es mantener este ritmo de publicaciones, una veintena de notas, pero tratando de resolver parte de esa cincuentena de temas que no termino de redondear. ¿Habrá otros proyectos más allá del blog? Tengo algunas ideas que rondan mi mente, pero están muy verdes todavía, veremos que me deparan los primeros meses.

 

BAJA EL TELÓN

 

Más o menos así lucen mis archivos pendientes de publicar [Fuente: Dreamstime]

CUARTO ACTO (FINAL)
 

Estimados lectores constantes, así termina este balance de 2020+ (o 2021, como les guste), un año muy complejo. Lo único que me queda por decirles es GRACIAS por leer, por comentar, por compartir los artículos, en fin, por estar. Les deseo a todos una Muy Feliz Navidad y un excelente 2022, y como de costumbre, nos volveremos a encontrar en la próxima entrada... el próximo año. Hasta entonces.

BAJA EL TELÓN, SE APAGAN LAS LUCES

 

Fuente: Artigoo

Nota agregada a último momento: El año pasado me sorprendió, a último momento, con el fallecmiento de Don Oscar Ebene, hecho que recién pude reflejar en el blog un par de días después, ya en 2021. En el curso del día, mientras terminaba de editar los enlaces de la nota antes de publicarla, veo como otra vez más mi querida provincia, Chubut, estalla de la mano del mamarracho de la zonificación minera, de los dirigentes políticos que no están a la altura de los acontecimientos y de una revuelta social que, lamentablemnte, termina generando destrozos que nos afectan a todos. Una vez más, el gobierno de la provincia de Chubut le falla a su pueblo... ¿por cuánto tiempo más?