El mar devela un misterio: el ARA San Juan

Escribo estas líneas a las apuradas, alterando la rutina del blog (estaba trabajando en otra entrada), debido a las noticias que son de público conocimiento desde hoy, 17 de noviembre de 2018, a la madrugada. Después de un año de búsqueda intensa, finalmente se ha encontrado el submarino desaparecido, el ARA San Juan, a 900 metros de profundidad, en la zona donde se buscó y rebuscó intensivamente durante aquellas primeras semanas angustiantes de noviembre y diciembre de 2017. Se cierra una etapa, teniendo ahora la certeza de donde se encuentran los restos, y se abre una nueva. ¿Se pueden recuperar los restos? La respuesta técnica seguramente es sí, por lo que la repregunta es ¿es viable, económicamente y políticamente, recuperar los restos? Creo que en los próximos meses habrá un intenso debate sobre este tema.

El ARA San Juan, en una de sus últimas imágenes [fuente: Página12].

Todo este trágico accidente, que el tiempo terminará de demostrar cuanto de negligencia y/o mala fortuna lo provocaron, me hace reflexionar sobre el mar y sobre los secretos que esconde. Con todos los medios desplegados en la búsqueda del submarino, tanto al principio, con la colaboración de barcos de diversos países equipados con la más alta tecnología, hasta ahora, con la empresa contratada en septiembre de 2018, Ocean Infinity, y considerando que se buscaba en un área relativamente acotada, llevó un año encontrar un objetivo bien definido. ¿Cuántos naufragios e historias se hallan escondidas en el fondo del océano? ¿Cuántos misterios aún yacen en las profundidades? A pesar de los avances de la ciencia y la tecnología, el mar aún se resiste a develar todos sus secretos.

El hallazgo del ARA San Juan plantea muchas preguntas, no solo sobre el porqué del hundimiento, sino sobre todos aquellos naufragios que nunca han podido ser identificados, como el del ARA Guarani en la década de 1950 (Fuente: Wikipedia)

Para cerrar, y a modo de pequeño homenaje a los 44 tripulantes que dejaron su vida en el cumplimiento de su deber, patrullando las aguas soberanas argentinas, quiero compartir el poema "El Mar", de Jorge Luis Borges.

El mar (J.L. Borges)

Antes que el sueño (o el terror) tejiera
mitologías y cosmogonías,
antes que el tiempo se acuñara en días,
el mar, el siempre mar, ya estaba y era.

¿Quién es el mar? ¿Quién es aquel violento
y antiguo ser que roe los pilares
de la tierra y es uno y muchos mares
y abismo y resplandor y azar y viento?

Quien lo mira lo ve por vez primera,
siempre. Con el asombro que las cosas
elementales dejan, las hermosas
tardes, la luna, el fuego de una hoguera.

¿Quién es el mar, quién soy? Lo sabré el día
ulterior que sucede a la agonía.

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