Historia de una ballena blanca

Hace tres años, en mi visita habitual de fin de año a Puerto Madryn, cedí a la solicitud de mi hijos y fuimos a la Boutique del Libro a aprovisionarnos de material de lectura. No recuerdo bien la compra completa, pero sí que mi hija eligió "Historia de una ballena blanca", del escritor chileno Luis Sepúlveda (este sería el último libro de Sepúlveda, ya que falleció poco tiempo después a causa del COVID, en las primeras semanas de la pandemia). Se trata de una novela breve (para jóvenes de 8 a 88 años, según dice en la portada), o más bien un cuento largo (son 92 páginas), que relata la historia de un cachalote albino en las aguas del sur de Chile, más precisamente en las inmediaciones de la isla Mocha. En su momento no presté atención al libro, a pesar de que mi hija dijo que era muy bueno, pero al encarar su lectura hace unos días, descubrí dos cosas. La primera, es que la historia es muy linda, y el relato es ameno y fácil de leer. La segunda es que la historia se inspira en un caso real, el caso del cachalote albino Mocha Dick, fuente de inspiración de la célebre historia de Moby Dick.

El explorador estadounidense Jeremiah N. Reynolds (1799-1858), también conocido por su trabajo como escritor y editor de periódicos, recopiló las observaciones de primera mano sobre un viejo cachalote, de prodigioso tamaño y fuerza, que era blanco como la lana (sic), que merodeaba en las aguas cercanas a la isla Mocha (Chile), a principios del siglo XIX. Publicó un relato basado en estas historias, llamado «Mocha Dick o la ballena blanca del Pacífico: una hoja de un periódico manuscrito», que apareció en mayo de 1839 en la revista neoyorquina The Knickerbocker.

Portada de la revista The Knickerbocker de mayo de 1839 (izquierda) y extracto de la primera hoja del relato de Reynolds sobre Mocha Dick (derecha). Fuente: Google Books.

Según Reynolds, Mocha Dick fue avistado y atacado por vez primera en algún momento antes del año 1810. A partir de entonces se hizo famoso entre los balleneros norteamericanos que venían desde Nantucket, especialmente por su color blanco. Tenía la cabeza cubierta de percebes, lo cual le daba un aspecto rugoso, y se diferenciaba también por tener un método particular de respiración diferente al de otros cachalotes. Muchos trataron de cazarlo, pero el cachalote respondía con ferocidad y astucia, llegando a ser muy temido por los arponeros.

 

Litografía coloreada del pintor francés Cyprien Gaulon que representa el hundimiento del ballenero Essex de Nantucket por una ballena el 20 de noviembre de 1820. A falta de un modelo, Gaulon se tomó una licencia artística al representar el incidente. El barco no parece ser un ballenero y la ballena, demasiado grande en comparación con el barco, no es un cachalote, sino que más bien parece una ballena de Groenlandia. Fuente: Nantucket Historical Association.

Croquis realizado por Thomas Nickerson, grumete del ballenero Essex. que muestra como fue el ataque del cachalote en 1820. Dicen que Mocha Dick era muy grande y fuerte, capaz de hacer naufragar pequeñas embarcaciones con su aleta caudal. Algunos la relacionan con el hundimiento del ballenero Essex, pero según los testimonios de la época, este barco fue hundido por un cachalote normal, no uno albino, además que la distancia entre la isla Mocha y el lugar del hundimiento del Essex era muy grande. Fuente: Wikipedia.

Al parecer Mocha Dick sobrevivió a muchas escaramuzas con balleneros antes de que finalmente lograran darle caza en 1838. Dicen que su cuerpo tenía aproximadamente 24 metros de longitud y que se obtuvieron 100 barriles de aceite (el doble de lo habitual para estos cetáceos), junto con algo de ámbar gris. Tenía restos de una veintena de arpones incrustados en su cuerpo, producto de decenas de intentos de captura previos.

Esta foto de un arpón incrustado entre las costillas de una ballena fue extraída de un posteo de Facebook y corresponde a algún museo desconocido. Lo más sorprendente de la foto es que el arpón se calcificó entre las costillas, lo cual indica que el animal sobrevivió largamente al ataque del ballenero. Según los testimonios, Mocha Dick tenía restos de una veintena de estos arpones en su cuerpo. Fuente: Facebook A Que No Sabías.

Seguramente habrán notado la similitud entre los nombres "Mocha Dick" y el conocido libro de Herman Melville, "Moby Dick". Al parecer, el texto de Reynolds, publicado en 1839, fue una de las fuentes de inspiración para la novela de Melville, que se publicó en 1851. Sin embargo no fue la única, porque el incidente del Essex también influyó en Melville, e incluso podría haberse inspirado también en otra historia mucho más antigua, la de Porfirio, el misterioso cetáceo que aterrorizó a los marinos bizantinos en el siglo VI.

¿Es el relato de Reynolds completamente fiable o es parte de un relato ficticio? ¿Cuánto de la historia del cachalote albino de la isla Mocha es cierta? Son preguntas que por ahora exceden esta humilde nota y que posiblemente nunca tengan respuesta. Pero la historia de Mocha Dick es fascinante y bien valdría la pena que fuese cierta, así que prefiero creer que fue así, y que hace dos siglos, un cachalote muy grande y feroz le complicó la existencia a más de un ballenero. Los dejo, por ahora, para que se hagan sus propias preguntas sobre este tema. Por mi parte los espero en la próxima nota, que muy posiblemente se trate de algo que sucedió fuera de los mares. Hasta entonces.

Así es como debemos ver a las ballenas, capturadas con una cámara fotográfica en lugar de con un arpón.

Nota al pie: El relato completo de J.N. Reynolds lo pueden encontrar en estos repositorios:

- Google Books

- The life and works of Herman Melville

- Geneva Courier, 18 de junio de 1839